El pasado miércoles 29 de junio, una familia de Envigado se enfrentó a una terrible tragedia que ha conmocionado a todos. Un joven de 22 años ingresó a su vivienda, y agarró la escopeta de su padre; paso siguiente, hizo algunos disparos y uno de ellos fue a parar en el cuerpo de su progenitor. Ante el desespero de ver a su padre herido en el piso, el joven se encerró en una habitación de la casa, y ahí descargó en su cuerpo todas las municiones que le quedaban.
El impresionante suceso, generó la muerte inmediata del joven, quien al parecer presentaba algún cuadro psiquiátrico. Así lo reveló el el subcomandante de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, coronel Rolfy Mauricio Jiménez,
“Al parecer, por situaciones de índole psiquiátrico, reacciona de una manera alterada. Toma una escopeta, hace disparos en todas las direcciones. Lesiona inicialmente a su papá a la altura del abdomen” señaló el hombre.
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El padre del victimario fue trasladado de urgencias a un centro médico de la capital de Antioquia, en el que fue auxiliado por profesionales de la salud. Lo que se sabe hasta el momento es que se encuentra en un estado delicado de salud.
El lamentable hecho generó que se volvieran a encender las alarmas, pues lo cierto es que en los últimos meses se ha presentado un aumento, en el número de casos de personas afectadas por enfermedades mentales.
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“La pandemia ha dejado un aumento sustancial de casos de trastornos mentales como depresión y ansiedad”, señaló el gerente del Hospital Mental de Antioquia, Alberto Aristizábal.
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