El hábito de llevar el teléfono al baño para “matar el tiempo” podría estar afectando más que tu higiene. Desde problemas musculares hasta riesgos serios como hemorroides y cáncer colorrectal, los especialistas advierten sobre las posibles consecuencias de pasar demasiado tiempo sentado en el inodoro.
El diseño del inodoro moderno no es del todo amigable para la salud. Según el Dr. Lai Xue, cirujano colorrectal de la Universidad de Texas, “la posición que adoptamos en el inodoro dificulta el retorno de la sangre al corazón, lo que provoca acumulación en las venas del ano y el recto” . Este fenómeno aumenta el riesgo de desarrollar hemorroides.
¿Por qué es peligroso estar mucho tiempo en el inodoro?
La presión constante sobre los músculos del suelo pélvico puede debilitarlos, derivando en condiciones como el prolapso rectal, donde el recto sobresale por el ano. Este debilitamiento también puede comprometer la funcionalidad de los músculos anales, afectando la capacidad de evacuar de forma normal.
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Los expertos destacan que ciertos comportamientos podrían ser señales de problemas más graves:
- Fuerza excesiva al evacuar. Según la Dra. Farah Monzur, “quedarte mucho tiempo sentado puede hacer que, sin darte cuenta, ejerzas demasiada presión, lo que agrava el riesgo de hemorroides y debilita aún más los músculos pélvicos”.
- Estreñimiento prolongado o sangrado. El Dr. Uradomo advierte que estos síntomas podrían ser indicadores de problemas gastrointestinales como el síndrome del intestino irritable o incluso cáncer colorrectal. Un bulto en el colon puede bloquear el paso de las heces, causando estreñimiento severo.
¿Cuáles son los síntomas de que algo no anda bien con el colón?
Si presentas alguno de los siguientes durante más de tres semanas, busca atención médica:
- Dolor abdominal persistente: Calambres o molestias en el abdomen, que pueden ser constantes o aparecer después de comer.
- Cambios en las heces: Variaciones en la consistencia (diarrea o estreñimiento), forma o color de las heces.
- Sangre en las heces: Puede ser roja brillante o tener un tono oscuro, indicando sangrado interno.
- Gases excesivos o hinchazón: Sensación de inflamación abdominal que no mejora con cambios en la dieta.
- Pérdida de peso inexplicada: Baja de peso repentina sin estar en un programa de dieta o ejercicio.
- Fatiga constante: Sensación de cansancio extremo, que puede estar asociada a anemia por pérdida de sangre en el colon.
- Evacuación incompleta: Sensación de no haber vaciado completamente los intestinos después de ir al baño.
- Dolor rectal: Molestias o presión al evacuar.
La Sociedad Estadounidense del Cáncer ha reportado un aumento en los casos de cáncer colorrectal en personas menores de 55 años desde los años 90. Este tipo de cáncer es más tratable cuando se detecta a tiempo, por lo que es crucial estar atentos.
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Cómo cuidar tu salud al ir al baño
- Limita el tiempo en el inodoro a menos de cinco minutos.
- Evita llevar el teléfono u otros dispositivos para no distraerte.
- Si tienes problemas frecuentes de evacuación, consulta a un especialista en salud gastrointestinal.
En palabras del Dr. Xue: “La prevención comienza con buenos hábitos. Hacer del baño un lugar de descanso prolongado puede costarte más de lo que crees”. Prioriza tu bienestar y evita complicaciones a largo plazo.