En Colombia, el incumplimiento de las obligaciones alimentarias por parte del progenitor no es, por sí mismo, una causal para quitar el apellido paterno a un hijo. Sin embargo, existen mecanismos legales que pueden ayudar a resolver situaciones de este tipo. A continuación, se describe un enfoque general sobre cómo abordar esta problemática:
1. Incumplimiento de la Cuota Alimentaria
Lo primero que debe hacerse es intentar resolver el problema del incumplimiento de la cuota alimentaria. Según el Código de Infancia y Adolescencia en Colombia, el progenitor tiene la obligación de contribuir económicamente al sostenimiento de sus hijos. Si el padre no cumple con esta obligación, se puede iniciar un proceso legal para exigir el pago de la cuota alimentaria.
Para ello, es necesario acudir a una Comisaría de Familia o a un juez de familia. Se debe presentar una demanda de alimentos, en la cual se expondrá la situación y se solicitará la fijación de una cuota alimentaria. El juez podrá ordenar al progenitor incumplido que pague una suma mensual destinada al mantenimiento del hijo. En caso de persistir el incumplimiento, el juez puede imponer sanciones como el embargo de bienes o, en casos extremos, la privación de la libertad.
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2. Cambio de apellido
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Si el objetivo es cambiar el apellido del hijo debido al incumplimiento de las obligaciones paternas, se deben considerar ciertos aspectos legales. Según el Código Civil Colombiano, el cambio de apellido de un menor de edad es un proceso complejo que generalmente requiere el consentimiento de ambos padres y la autorización de un juez.
¿Qué hay que hacer para cambiar el apellido a un hijo?
- Solicitud Formal: se debe presentar una solicitud formal ante un juez de familia. Esta solicitud debe estar bien fundamentada y justificar las razones para el cambio de apellido. El incumplimiento de las obligaciones alimentarias puede ser uno de los argumentos presentados, aunque por sí solo no suele ser suficiente.
- Pruebas: es fundamental presentar pruebas que respalden la solicitud. Esto incluye evidencia del incumplimiento de la cuota alimentaria, y cualquier otro factor que demuestre que mantener el apellido del progenitor es perjudicial para el bienestar del menor.
- Audiencia: el juez convocará a una audiencia en la cual se escucharán los argumentos de ambas partes. Es posible que se solicite la participación del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) para evaluar la situación del menor y emitir un concepto sobre el cambio de apellido.
- Decisión judicial: el juez emitirá una decisión basada en el interés superior del niño. Si se considera que el cambio de apellido es lo mejor para el menor, se ordenará el cambio en el registro civil.
Es importante tener en cuenta que el proceso judicial puede ser largo y complejo. Además, el bienestar del menor es el principal criterio que el juez considerará al tomar una decisión. Si se demuestra que el cambio de apellido es necesario para proteger los derechos y el bienestar del niño, el juez puede acceder a la solicitud.
En cualquier caso, es recomendable contar con la asesoría de un abogado especializado en derecho de familia, quien puede guiar adecuadamente a lo largo del proceso y ayudar a presentar un caso sólido ante el juez.
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En todo caso recuerda que quitarle el apellido paterno a un hijo no es un proceso sencillo y requiere justificar que dicho cambio es en beneficio del menor. Aunque el incumplimiento de la cuota alimentaria puede ser un factor importante, no es la única consideración. El camino más adecuado es seguir los canales legales para asegurar el bienestar del niño, comenzando por garantizar el cumplimiento de las obligaciones alimentarias a través de los mecanismos judiciales disponibles.
Puedes ver: Qué es la cuota de alimentos en Colombia
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