Palomas, que tiene más de 2 millones de seguidores en Instagram, comenzó a ofrecer sus servicios como “esposa sustituta” hace unos meses en la plataforma OnlyFans. La joven asegura que se trata de un trabajo legítimo y que no tiene nada de malo.
“No soy una prostituta” , afirma Palomas. “Soy una mujer que ofrece sus servicios para ayudar a los hombres casados que necesitan una mano”.
Palomas explica que sus clientes suelen ser hombres que trabajan largas horas y que no tienen tiempo para atender a sus esposas. La joven también asegura que sus servicios pueden ayudar a mejorar la relación de pareja.
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“Hay muchos hombres que están frustrados porque sus esposas no les prestan atención”, señala Palomas. “Yo les ofrezco una mujer que les escuche, que les haga sentir amados y que les ayude con las tareas domésticas”.
Palomas ofrece una variedad de servicios a sus clientes. Puede cocinar, limpiar, hacer la compra, acompañar a sus clientes a eventos sociales, e incluso tener relaciones sexuales con ellos.
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La joven asegura que sus servicios son de alta calidad y que siempre cumple con las expectativas de sus clientes.
“Soy una mujer muy profesional”, afirma Palomas. “Siempre estoy dispuesta a complacer a mis clientes”.
El caso de Babi Palomas ha generado debate en las redes sociales. Algunos usuarios consideran que su trabajo es una forma de prostitución, mientras que otros creen que es un negocio legítimo.
Los defensores de Palomas argumentan que su trabajo es una forma de ofrecer compañía y apoyo a los hombres casados que necesitan una ayuda extra. Señalan que la joven no ofrece solo sexo, sino también otras tareas como cocinar, limpiar y hacer compañía.
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Los detractores de Palomas, por su parte, sostienen que su trabajo es una forma de explotación sexual. Argumentan que la joven está siendo utilizada por hombres que buscan satisfacer sus necesidades sexuales.
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