El caso de la desaparición de Laura Valentina Páez, una niña de 9 años en Chiquinquirá, sacude nuevamente a la comunidad en Boyacá y genera una gran conmoción en el país.El pasado 16 de enero, la niña salió a pasear a su perro en el barrio Juan Pablo Segundo del municipio de Chiquinquirá, y nunca regresó. La búsqueda de Laura Valentina llevó a las autoridades a identificar a Daniel Josué Zambrano, un vendedor de frutas de la zona, como el principal sospechoso.La confesión de Daniel Josué ZambranoSegún versión de las autoridades, en un principio Zambrano confesó haber raptado a Laura Valentina. Según su propio relato, aprovechó que la niña se quedaba sola en las noches, mientras su mamá trabajaba, para ganar su confianza. El día de su desaparición, la convenció de que subiera a su carro para dar una vuelta. Las cámaras de seguridad captaron el momento en que Laura Valentina subió al vehículo de Zambrano, alrededor de las 6:30 p.m. del día de la desaparición.El carro fue encontrado en un taller de latonería y pintura, donde se hallaron fluidos biológicos que están siendo analizados para determinar si son de la niña. La confesión de Zambrano revela un acto cruel y al parecer premeditado. Según la Policía de Boyacá, el sujeto se llevó a Laura Valentina a una zona rural del municipio, donde la habría abusado y acabado con su vida. Aunque Zambrano no ha confesado qué pasó con el cuerpo de la niña, se cree que la lanzó al río Minero, donde las autoridades están adelantando una búsqueda.Daniel Josué Zambrano fue enviado a la cárcelLa Fiscalía le imputó a Zambrano el delito de desaparición forzada, y un juez lo envió a la cárcel mientras avanza el proceso. La comunidad de Chiquinquirá y la familia de Laura Valentina esperan justicia y respuestas sobre lo que realmente sucedió con la niña. La búsqueda del cuerpo de Laura Valentina continúa, y las autoridades están trabajando para esclarecer los detalles de este lamentable caso que se suma a la conmoción en el departamento tras confirmarse que el cuerpo hallado en Sogamoso era el de la pequeña Sara Michel Vargas desaparecida desde el 25 de diciembre.La desaparición de Laura Valentina generó una gran movilización en la comunidad, con muchas personas saliendo a las calles para exigir justicia y respuestas. La familia de la niña ha expresado su gratitud por el apoyo y la solidaridad que han recibido, y piden que se haga justicia para que no se repitan casos como este en el futuro.En medio de la tristeza y la conmoción, la comunidad de Chiquinquirá se une para exigir justicia y respuestas sobre lo que sucedió con Laura Valentina. La búsqueda del cuerpo de la niña continúa, y las autoridades están trabajando para esclarecer los detalles de este caso.También puedes ver: Cronología del caso Sofía Delgado
El caso de la desaparición de Sara Michel Vargas, la niña de 11 años que había conmocionado a Sogamoso y al departamento de Boyacá, dio un giro importante con las recientes confirmaciones de la Fiscalía General de la Nación y Medicina Legal. Tras días de angustia y espera, las autoridades han confirmado que el cuerpo hallado en la zona donde fue vista por última vez sí corresponde a la menor desaparecida.El pasado 12 de enero, las autoridades encontraron un cuerpo en avanzado estado de descomposición en una zona rural cercana a donde Sara había sido vista por última vez. Aunque en un primer momento la identidad de los restos no se confirmó, las investigaciones continuaron a paso firme. Dos días después, el 14 de enero, se hallaron prendas que parecían pertenecer a la niña.Entre ellas, unos tenis que, según los testimonios de los familiares, eran similares a los que Sara llevaba el día de su desaparición. Cuerpo de hallado sí es de Sara Michel VargasFinalmente, Medicina Legal confirmó que el ADN del cuerpo encontrado en Sogamoso coincidía con el de la menor. Esta noticia puso fin a la incertidumbre que había mantenido a los habitantes de Boyacá, y especialmente a la familia de Sara, en vilo durante las últimas semanas. La Fiscalía, por su parte, no tardó en vincular a un familiar cercano con la desaparición. Juan Carlos Rodríguez, primo de Sara Michel Vargas, fue capturado el 16 de enero y será presentado ante un juez de control de garantías. Se le imputará el delito de desaparición forzada, y según las autoridades, su implicación en este caso podría escalar a cargos por feminicidio.Los medios regionales que han seguido el caso en Boyacá reportaron la confirmación del pronunciamiento de la Fiscalía, que corroboró el informe de Medicina Legal. Además, las autoridades continúan con las investigaciones para esclarecer todos los detalles alrededor de este hecho. Los vecinos de Sogamoso y la comunidad boyacense siguen muy atentos al proceso judicial, pues aunque la certeza sobre la identidad de Sara ya está confirmada, aún queda por saber más sobre lo que sucedió realmente en la madrugada de su desaparición.Con la captura de Juan Carlos Rodríguez y la confirmación de la identidad del cuerpo, las autoridades dan un paso importante en el proceso de justicia para Sara Michel Vargas. Puedes ver | Hombre murió en la sala de espera del hospital de Kennedy
La tranquilidad del barrio Juan Pablo Segundo, en Chiquinquirá, Boyacá, se vio interrumpida la noche del jueves 16 de enero tras la desaparición de Laura Valentina Páez Velandia, una niña de 9 años que salió de su hogar para pasear a su perro y nunca regresó. Este caso, que nuevamente genera gran consternación, ocurre semanas después de la desaparición de la menor Sara Michel Vargas en Sogamoso, Boyacá, encendiendo nuevamente las alarmas en el departamento.Según información de sus familiares, Laura Valentina Páez salió de su casa cerca de las 6:00 p. m., como lo hacía habitualmente para sacar a su mascota. Sin embargo, las cámaras de seguridad del sector registraron algo inquietante: la menor fue vista hasta las 6:25 p. m., acompañada de un hombre que posteriormente la subió a un vehículo. Este descubrimiento llevó a la familia a alertar de inmediato a las autoridades.Según narró Diego Velandia, hermano de la menor, al revisar las imágenes, observaron que Laura Valentina estaba en el área habitual, pero luego desapareció junto con el sujeto identificado en los videos. La denuncia fue presentada esa misma noche, lo que permitió activar los protocolos de búsqueda y las investigaciones preliminares.¿Qué se sabe del paradero de Laura Valentina Páez?El hombre captado por las cámaras fue ubicado en el sector de Boyacá Alto. Aunque admitió haber estado con la niña, negó haber tenido mayor contacto con ella. Sin embargo, nuevas evidencias sugieren que ambos ingresaron a un complejo de apartamentos cercano, donde se pierde su rastro. Este lugar se ha convertido en un punto clave para las pesquisas.El alcalde de Chiquinquirá, Jefferson Caro Casas, confirmó que la desaparición fue reportada formalmente el viernes en horas de la mañana. “Se convocó un consejo extraordinario de seguridad para coordinar las acciones necesarias con Policía, Ejército, Bomberos y Defensa Civil. No descansaremos hasta dar con el paradero de Laura Valentina”, afirmó el mandatario.En Chiquinquirá buscan desesperadamente a Laura Valentina PáezDesde el mediodía del viernes 17 de enero vecinos, familiares y voluntarios se sumaron a las labores de búsqueda en coordinación con las autoridades. Diego Velandia hizo un llamado urgente a la ciudadanía para que proporcione cualquier información que ayude a localizar a su hermana.Laura Valentina vestía un buzo gris, pantalón tipo jeans azul y zapatillas grises al momento de desaparecer. Es delgada, de tez blanca, cabello largo y rizado, y mide aproximadamente 1,20 metros.Para facilitar las denuncias, la familia habilitó los números 3136844475 y 3209859492. También se encuentran en contacto constante con la Fiscalía para avanzar en los trámites legales.Este lamentable hecho se suma a la desaparición de Sara Michel Vargas Vega, otra menor en Boyacá, cuyo caso sigue bajo investigación. La desaparición de Laura Valentina reafirma la necesidad de fortalecer las medidas de protección para los niños en la región.También puedes ver: Cronología del caso Sofía Delgado
El caso de Sara Michel Vargas, la niña de 11 años desaparecida en Sogamoso, Boyacá, continúa generando conmoción en el país. La investigación, liderada por la Fiscalía General de la Nación, apunta a Juan Carlos Rodríguez, primo de la menor, como principal sospechoso, después de que se recopilaran pruebas que lo vinculan directamente con la desaparición. El rastro de la niña se pierde en la vereda El Ciral, un lugar ubicado a solo 10 minutos del casco urbano de Sogamoso.El pasado 25 de diciembre, Sara Michel fue vista por última vez junto a su primo en el sector conocido como Vanegas, después de una discusión familiar. Según las investigaciones, Juan Carlos Rodríguez, de 23 años, la habría subido a su motocicleta y llevado hasta la vereda El Ciral. Este sitio, caracterizado por su aislamiento y escasa vigilancia, se convirtió en el punto final del trayecto de la niña. Varias declaraciones de testigos aseguran haber visto al hombre conduciendo la motocicleta mientras la menor iba como pasajera, datos que el acusado negó de manera reiterada ante las autoridades.Las evidencias de la Fiscalía contra Juan Carlos RodríguezEl CTI de la Fiscalía y la Policía Nacional realizaron dos allanamientos que permitieron recopilar información clave para emitir la orden de captura contra Rodríguez. Según el comunicado oficial, “el familiar de la víctima se encontró con ella en el sector de Vanegas y a bordo de una motocicleta la llevó a la vereda El Ciral”. La detención tuvo lugar en la vereda Cartagena, jurisdicción de Firavitoba, donde residía el sospechoso.A pesar de las pruebas presentadas, incluyendo testimonios, rastros tecnológicos y las declaraciones de los testigos, Rodríguez negó en todo momento haber tenido contacto con Sara el día de su desaparición. Ante el juez, el acusado no aceptó los cargos imputados por desaparición forzada.La incertidumbre persiste entre los familiares de Sara Michel. Según declaraciones de Fabiola del Pilar Vega Sierra, tía de la niña, todavía no hay certeza de la identidad de un cuerpo hallado en descomposición que podría ser el de la menor. "No nos dejaron ver absolutamente nada, no sabemos si los restos son de ella", expresó Vega Sierra, reflejando la angustia de la familia en medio de este caso.Mientras tanto, las autoridades continúan con la investigación para esclarecer lo sucedido y determinar el paradero de Sara Michel Vargas, cuyo rastro se desvaneció en la tranquilidad de la vereda El Ciral, un lugar que ahora concentra la atención de todo el país.Continúa viendo: Cronología del caso Sofía Delgado
El caso de Sara Michel Vargas, la niña de 11 años desaparecida en Sogamoso, Boyacá, ha dado un giro impactante con la detención de su primo, Juan Carlos Rodríguez, como principal sospechoso. La Fiscalía General de la Nación presentó pruebas contundentes que lo vinculan directamente con los hechos, entre ellas testimonios, rastros tecnológicos y un inquietante trayecto en motocicleta que apunta a su responsabilidad.Rodríguez, de 23 años, fue visto por última vez con Sara en el sector conocido como Vanegas el pasado 25 de diciembre, día en que la menor desapareció tras una discusión familiar. Según las investigaciones, él la habría subido a su motocicleta y llevado a la vereda El Ciral, un lugar apartado y con poca vigilancia, que se convirtió en el punto final del rastro de la niña.Al parecer, varios testigos confirmaron haber visto a Rodríguez y a Sara juntos ese día, un dato que el acusado negó en repetidas ocasiones ante las autoridades. Sin embargo, los relatos coinciden en que el hombre conducía la motocicleta mientras la niña iba como pasajera. Estas declaraciones fueron corroboradas por un equipo especializado del CTI, que se encargó de reconstruir los últimos momentos de la menor con base en las versiones de los testigos.Evidencias físicas: una moto y prendas de la niñaLa motocicleta de Rodríguez se convirtió en una pieza clave del rompecabezas. Las autoridades encontraron rastros que podrían confirmar que la menor estuvo a bordo del vehículo. Además, en los alrededores donde se halló un cuerpo en descomposición, se identificaron unas prendas que los familiares aseguran podrían pertenecer a Sara, aunque la confirmación oficial de Medicina Legal aún está en proceso.Mientras tanto, Juan Carlos Rodríguez fue detenido en su vivienda, ubicada en la vereda Cartagena, Firavitoba. Aunque se le imputó el delito de desaparición forzada, él negó las acusaciones. Sin embargo, las pruebas en su contra podrían abrir la puerta a un cargo más grave, como feminicidio, si se confirma que los restos hallados corresponden a la menor.Puedes ver | Encuentran sin vida a Sofía Delgado, la niña desaparecida en Valle del Cauca
El departamento de Norte de Santander sigue conmocionado por el violento ataque armado ocurrido la noche del miércoles 15 de enero en Tibú, Catatumbo. Tres miembros de una familia, entre ellos un bebé, perdieron la vida al ser atacados mientras viajaban en el carro fúnebre con el que el papá de la familia se ganaba la vida. Sin embargo, un niño de 10 años logró sobrevivir gracias a un acto de valentía que lo llevó a escapar del trágico incidente.El ataque sucedió en una carretera que conecta Tibú con Cúcuta, Norte de Santander, cuando el vehículo fue interceptado por hombres armados en motocicletas. Sin importar que dentro del carro viajaban menores de edad, los atacantes dispararon indiscriminadamente contra los ocupantes.¿Cómo se salvó del ataque armado en Tibú el niño de 10 años?En medio del caos, el niño de 10 años, que se encontraba en la parte trasera del vehículo, aprovechó un momento crucial para abrir las puertas y escapar. Vecinos que escucharon los disparos acudieron rápidamente al lugar y brindaron protección al menor, quien logró salir ileso del ataque.Según el relato del alcalde de Tibú, Richard Claro, el menor fue auxiliado por los habitantes de la zona hasta la llegada de las autoridades. Posteriormente, fue entregado a sus familiares, quienes ahora lo tienen bajo su cuidado con el acompañamiento del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF).“La información que tenemos es que el niño iba en la parte trasera del vehículo. Fue testigo de los hechos, logró salir del carro y está con vida gracias a que los vecinos lo protegieron”, expresó el alcalde a medios locales.Avanza investigación por ataque a Miguel Ángel López y su familia en Tibú, Norte de SantanderEl ataque, que dejó un saldo trágico, aún está siendo investigado por las autoridades. De acuerdo con el alcalde Claro, no existían denuncias previas ni indicios de amenazas contra Miguel Ángel López, el padre de familia que falleció en el incidente junto con su esposa y el bebé de 9 meses.“Dos días antes hablé con él, no había nada fuera de lo normal”, señaló Claro, quien también lamentó profundamente la pérdida de esta familia. Sobre el menor sobreviviente, agregó: “Está bajo el cuidado de familiares, pero seguimos atentos a garantizar su bienestar y apoyo emocional”.Este hecho resalta la vulnerabilidad que viven los habitantes del Catatumbo, una región marcada por la violencia. Mientras las investigaciones avanzan, el valiente escape del niño de 10 años se convierte en un rayo de esperanza en medio de la tragedia que rodea a esta comunidad.Continúa viendo: Hombre murió en la sala de espera del hospital de Kennedy, en Bogotá, ¿hubo negligencia?
Juan Carlos Rodríguez, primo de Sara Michel Vargas, fue enviado a la cárcel tras ser señalado como el principal sospechoso de la desaparición de la niña de 11 años en Sogamoso, Boyacá. La Fiscalía presentó al joven de 23 años ante un juez de control de garantías, quien decidió imponerle medida de aseguramiento en establecimiento carcelario mientras continúa la investigación.Sara Michel Vargas desapareció el 25 de diciembre de 2024 después de una discusión familiar. La niña salió de su hogar, y tras una breve búsqueda, sus familiares no lograron encontrarla. Las investigaciones apuntan a que Rodríguez fue la última persona en tener contacto con la menor, ya que la habría llevado en su motocicleta hasta la vereda El Ciral, donde se perdió su rastro.¿Cuáles son las pruebas en contra del primo de la menor?El Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) y la Policía Nacional han recopilado pruebas que vinculan a Rodríguez con la desaparición. Aunque él negó cualquier relación con el caso, los investigadores presentaron elementos materiales probatorios que refuerzan las acusaciones. Ante esto, un fiscal de la Seccional Boyacá le imputó el delito de desaparición forzada, aunque el detenido no aceptó los cargos.Los testimonios de los familiares han revelado que Sara salió de la casa tras una discusión, pero no hubo regaños ni razones claras para su partida. Según su madre, vio a la niña salir por el portón antes de que la buscara, pero ya no logró encontrarla. La hermana mayor de Sara, Mayerly Andrade, también relató que la niña se alteró por diferencias familiares antes de irse de casa.El caso dio un giro este 12 de enero cuando las autoridades encontraron un cuerpo en avanzado estado de descomposición cerca del lugar donde Sara fue vista por última vez. Aunque aún no se ha confirmado su identidad, las investigaciones continúan para identificar los restos.El 14 de enero, las autoridades hallaron una prenda que podría pertenecer a Sara. A pesar de la identificación preliminar de unos tenis que, según la abuela de la niña, podrían ser de ella, la confirmación oficial sigue pendiente.Puedes ver | Encuentran sin vida a Sofía Delgado, la niña desaparecida en Valle del Cauca
La desaparición de Sara Michel Vargas Vega, una niña de 11 años que conmocionó a Sogamoso, Boyacá, tomó un rumbo inesperado con la captura de Juan Carlos Rodríguez Vargas, primo de la menor. Este hecho marca un avance significativo en la investigación liderada por la Fiscalía General de la Nación, quien lo señala como el principal sospechoso de desaparición forzada de la pequeña.El allanamiento que habría delatado a Juan Carlos RodríguezLas autoridades realizaron allanamientos en dos viviendas, una de las cuales pertenecería a Rodríguez. Durante estas inspecciones, encontraron elementos vinculados con Sara Michel Vargas, lo que despertó las sospechas de los investigadores.Un hallazgo crucial fue una motocicleta de propiedad de Juan Carlos en la que se detectaron rastros de sangre. Aunque aún se están realizando pruebas para determinar si corresponden a la niña desaparecida, este descubrimiento fue suficiente para proceder con la detención preventiva del sospechoso.Juan Carlos Rodríguez tenía una relación cercana con la familia de Sara Michel y, según versiones preliminares, habría estado presente en la celebración de Navidad, la última noche en que se vio con vida a la menor.Además, los investigadores han considerado su actitud durante las marchas y actividades de búsqueda como sospechosa, ya que participó activamente portando carteles con la imagen de la niña, lo que ha generado una gran indignación en la comunidad.Su captura se llevó a cabo en su vivienda en el municipio de Sogamoso luego de que un juez avalara la orden de captura como principal sospechoso en el delito de desaparición forzada.Avances en la investigación por el caso de Sara Michel VargasDesde la desaparición de Sara Michel el pasado 25 de diciembre, se activaron los protocolos de búsqueda, incluyendo el Mecanismo de Búsqueda Urgente (MBU), que intensificó las labores de localización. La captura de Rodríguez, efectuada este viernes 17 de enero, representa un punto clave en el esclarecimiento del caso.Según informaciones no oficiales, Rodríguez habría presenciado una supuesta discusión familiar que se desató después de unas confesiones hechas por Sara Michel. Este incidente habría sido aprovechado por el primo para acercarse a la menor en un momento de vulnerabilidad. Además, su vivienda se encuentra cerca del lugar donde fue hallado un cuerpo, que las autoridades intentan identificar para confirmar si se trata de la niña desaparecida.Lo que más ha impactado a los habitantes de Sogamoso es la aparente doble moral de Rodríguez. Su participación activa en las marchas y actividades de búsqueda contrasta con las sospechas que ahora recaen sobre él. Este comportamiento ha dejado perpleja a la comunidad, que espera justicia para Sara Michel.Las autoridades continúan recopilando evidencias y llevando a cabo pruebas forenses para confirmar la identidad del cuerpo encontrado y establecer la responsabilidad de Rodríguez en los hechos. La investigación sigue abierta y se espera que pronto se arrojen más detalles que permitan esclarecer este lamentable caso.Continúa leyendo: encuentran sin vida a Sofía Delgado, la niña desaparecida en Valle del Cauca
Un nuevo y desgarrador capítulo se escribe en el caso de Sara Michel Vargas Vega, la niña de 11 años desaparecida en la vereda Vanegas, Sogamoso, desde el pasado 25 de diciembre. Juan Carlos Rodríguez Vargas, primo de la menor, fue capturado como presunto responsable del delito de desaparición forzada.La Fiscalía General de la Nación, a través del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI), vinculó al primo de la niña tras reunir pruebas contundentes como por ejemplo los rastros de sangre que había en la moto del joven.Según informaron, desde el primer día de la desaparición se activaron los protocolos correspondientes, registrando el caso en el Formato Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas. Posteriormente, el 28 de diciembre, se implementó el Mecanismo de Búsqueda Urgente (MBU) para intensificar las labores de localización.A pesar de estos esfuerzos, el MBU no arrojó resultados inmediatos, por lo que el 29 de diciembre se abrió una investigación penal formal por el delito de desaparición forzada. Las autoridades señalaron que el material probatorio recaudado permitió relacionar a Juan Carlos Rodríguez con la desaparición de Sara Michel Vargas.Juan Carlos Rodríguez es uno de los principales sospechosos en el caso de Sara Michel VargasUno de los allanamientos que las autoridades previamente hicieron fue a la casa donde vive el primo de la menor Juan Carlos Rodríguez, allí los investigadores hallaron elementos de la niña, razón por la cual se sospecha del hombre y por lo que este viernes 17 de enero se hizo efectiva su captura.Preliminarmente se conoció que el primo era cercano a la familia, vivía en el mismo municipio, en una casa cercana a donde encontraron el cuerpo del cual se investiga si los restos son de la pequeña de 11 años desaparecida desde el 25 de diciembre.La otra vivienda del allanamiento es en el barrio Cartagenita de Sogamoso por lo que también se presume que había una relativa cercanía. Según versiones no oficiales presuntamente el primo habría asistido a la celebración de Navidad en la que estuvo la pequeña Sara Michel Vargas la noche anterior a su desaparición.Un detalle que hace parte de la investigación es que Juan Carlos Rodríguez presuntamente habría presenciado la supuesta pelea que se desató después de las confesiones de Sara Michel Vargas, esto habría sido aprovechado por el primo para acercarse a la niña en medio de la pelea.Primo de Sara Michel Vargas participaba en su búsquedaLo que más ha impactado a la comunidad es que Rodríguez participó activamente en las manifestaciones para buscar a la menor, incluso portando carteles con su fotografía. Este comportamiento ha generado indignación y desconcierto entre los habitantes de la región.La detención del primo marca un avance importante en la investigación, las autoridades continúan trabajando para confirmar la identidad del cuerpo encontrado y esclarecer los hechos.Hallazgo de un cuerpo sin identificar en Sogamoso, sería el de Sara Michel VargasEl pasado 12 de enero, las autoridades localizaron un cuerpo en avanzado estado de descomposición en el sector El Espino, barrio Venecia, a pocos kilómetros de donde Sara Michel fue vista por última vez. Aunque familiares de la niña aseguran que ciertos objetos encontrados en el lugar, como unos tenis y partes de ropa, podrían pertenecer a la menor, no se ha confirmado su identidad debido al deterioro de los restos.El alcalde de Sogamoso, Mauricio Barón Granados, expresó su compromiso con la búsqueda de justicia y destacó el esfuerzo conjunto de las autoridades locales y nacionales. "Esperamos que prontamente se haga justicia y se esclarezcan los móviles de este caso para prevenir la violencia contra los niños y las niñas", afirmó.El caso de Sara Michel sacude profundamente a la sociedad y recuerda los otros recientes casos de menores desaparecidas y posteriormente halladas sin vida como el caso de Sofía Delgado o Michel Dayana González.Mira también: Encuentran sin vida a Sofía Delgado, la niña desaparecida en Valle del Cauca
La incertidumbre rodea el caso de Sara Michel Vargas, la niña de 11 años desaparecida el pasado 25 de diciembre en Sogamoso, Boyacá. A pesar del hallazgo de restos humanos en el barrio Venecia, cerca de su vivienda, la familia mantiene la esperanza de encontrarla con vida. Los restos encontrados están en proceso de identificación mediante exámenes de ADN, ya que su avanzado estado de descomposición impidió el reconocimiento visual.La discusión en la familia de Sara Michel Vargas; un detonanteLa noche de Navidad, tras regresar de una celebración familiar en Firavitoba, la tranquilidad se rompió por una acalorada discusión en casa de Sara. Según declaraciones de sus padres y hermana mayor, sí hubo una discusión la que, al parecer, involucraba a la familia paterna y esto habría afectado profundamente a la menor. Sin embargo, los testimonios de sus familiares sobre lo ocurrido esa noche presentan varias contradicciones. Leidy Vega, madre de Sara, afirmó que la discusión fue entre miembros de la familia de su esposo y que, durante el caos, vio a la niña salir por el portón. “Cuando fui a buscarla, ya no estaba”, relató.Por su parte, Víctor Alfonso Vargas, padre de la niña, negó haber tenido un enfrentamiento directo con Sara: “Ni la regañé ese día para nada. No sé por qué se fue”.Sara Michel Vargas habría hecho una confesiónMayerly Vega, hermana mayor de Sara, ofreció un detalle crucial: en medio de la discusión, la menor habría confesado algo que no fue bien recibido por sus padres. Según Mayerly, esta reacción negativa fue lo que llevó a Sara a abandonar el hogar. La hermana mayor mencionó que trató de buscarla pocos minutos después de que saliera, pero ya era demasiado tarde.“No éramos muy unidas por la diferencia de edad, pero nos queríamos. Sara era incondicional conmigo y adoraba a mi hijo. Fue como una hija para mí porque ayudé a criarla”, expresó Mayerly al recordar a su hermana.De acuerdo con Mayerly, Sara tenía una relación distante con su padre debido a sus largas jornadas laborales. Por otro lado, pasaba más tiempo con su madre, ayudándola en las tareas del hogar y en la finca. A pesar de esto, nunca había mostrado comportamientos impulsivos que sugirieran que pudiera salir de casa en un arrebato.Las autoridades continúan investigando, y los resultados del ADN serán clave para esclarecer si los restos hallados corresponden a la menor. Entre tanto, la familia se aferra a la esperanza de que Sara regrese o sea hallada en algún lugar, aún con vida, aunque el tiempo y las circunstancias les jueguen en contra.Sigue viendo: Casa de Flavia Do Santos fue robada, mientras ella estaba en Río de Janeiro