La tragedia del submarino Titán, que desapareció y posteriormenteimplosionó en las profundidades del marcuando se dirigía a visitar losrestos del Titanic, que reposan en el fondo del mar, revivió la tragedia del barco ocurrida de 1912.
Pues aun es bastante la curiosidad que despierta en el mundo conocer cómo ocurrió la tragedia del entonces barco más grande del mundo y que en su primer viaje terminó hundido tras chocar conta un inmenso bloque de hielo.
Esta curiosidad llevó a cinco personas a emprender una arriesgada expedición al fondo del mar en el submarino Ocean Gate que los llevaría a explorar la zona en la que se hundió el Titanic, en el Atlántico Norte.
Pero la expedición terminó nuevamente en tragedia, pues antes de llegar al destino el submarino desapareció y cuatro días después se confirmó que había implosionado en lo profundo de las aguas, causando la muerte a todos sus tripulantes.
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La tragedia fue lamentada en todo el mundo y surgieron diferentes versiones sobre por qué la tripulación no logró llegar a su objetivo y regresar con vida. Sobre esto hay explicaciones científicas y de expertos que dan razones sobre lo sucedido; pero también hay otras teorías conspirativas que dan versiones distintas, como una supuesta "maldición por escarbar lo que el Titanic se llevó".
Y en medio de tantas versiones se conoció una historia que captó la atención, pues tiene que ver con una lamentable coincidencia entre las víctimas del Titanic y del Titán, pese a que han pasado más de 110 años de aquel primer suceso.
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Resulta que, paradójicamente, la esposa de Stockton Rush, quien era el director ejecutivo y quien piloteaba en submarino es familiar descendiente de una de las parejas que más conmovió con su muerte en el Titanic: la pareja de ancianitos que murió abrazada mientras el Titanic se hundía en en abril de 1912.
Esto se determinó luego de que una investigación realizada por The New York Times, revelara que Wendy Hollings Weil o Wendy Rush, esposa del piloto fallecido en el submarino, “es tataranieta de Isidor Straus y su esposa, Ida, dos de las personas más ricas que murieron en el hundimiento del transatlántico”.
Luego de la revelación, miles de internautas reaccionaron y dedujeron que dicha pareja de magnates son los ancianitos que aparecen en la película Titanic, quienes se resignan a no lograr abordar los pocos botes que tenía el barco y deciden esperar su muerte acostados y abrazados en la cama.
Esta coincidencia ha despertado aún más la nostalgia por la reciente tragedia del submarino y que revivió la ocurrida hace 111 años con el Titanic.
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